Dubrovnik es una bella ciudad costera de Croacia, conocida
como la Perla del Adriático por
su gran riqueza artística e histórica, lo cual hizo que se declarará
Patrimonio de la Humanidad. Tiene una población superior a los cuarenta mil
habitantes y es uno de los centros turísticos más importantes del mar
Adriático. El casco antiguo está rodeado de murallas y fortificaciones. Su calle
principal se llama Stradum y lo es desde el siglo XIII, fue pavimentada en el
XV y reconstruida después del terremoto del XVII, donde adquirió el aspecto que
presenta hoy en día con el acabado brillante de piedra caliza. Los edificios
que aparecen a ambos lados de la calle también fueron reconstruidos, con bellas
fachadas simétricas y altura uniforme. Ni que decir tiene, que muchos de los
edificios más interesantes de la ciudad se encuentran aquí, la mayoría de ellos
dedican sus bajos a restaurantes, bares y tiendas, que por otra parte, es lo
que encontramos en el resto de la ciudad amurallada. El paseo por las demás calles
es muy agradable y entretenido, con unas vistas al mar preciosas y
una pequeña playa de aguas cristalinas, próxima a un pequeño puerto en el
exterior del recinto antiguo.
Nota: Fotos del autor