lunes, 2 de noviembre de 2020

HACHA DE MANO PALEOLÍTICA

 

     El hacha de mano más antigua de Europa, un bifaz (tallado por las dos caras), se ha encontrado en la Región de Murcia, concretamente en la Cueva Negra de Caravaca de la Cruz, un abrigo de montaña de unos doce metros de profundidad. Es un hacha de piedra caliza y podría tener una antigüedad que sobrepasaría los 800 000 años.

     Este tipo de artefactos aparecieron hace más de 1,5 millones de años en el continente africano y servían para cortar, rallar, desgastar, e incluso perforar otros materiales. Se halla en magnífico estado con sus bordes perfectamente afilados, pero sin punta. El Homo antecessor (hombre explorador), cuyos restos han aparecido también en el yacimiento de Atapuerca, pudo ser el autor de este espléndido instrumento de piedra, que presenta unas dimensiones de poco más de 9 cm. de longitud, 6 cm. de anchura y unos 3,5 cm. de grosor.

      R.R.C.


miércoles, 28 de octubre de 2020

MONEDA DE PTOLOMEO III

      Aunque Ptolomeo III nunca emitió moneda con su propia efigie, la que vemos en la imagen fue mandada a acuñar por su sucesor e hijo Ptolomeo IV Filopátor en memoria de su padre en el último tercio del siglo III a. C. Fue hallada en unas excavaciones llevadas a cabo en la antigua ciudad de Tanis al norte de Egipto. Nos encontramos ante un octodracma de gran belleza que supera los 25 g de peso y unos 27 mm de diámetro, con grafila perlada por las dos caras (fila de puntos que rodea la moneda).

     En el anverso, el soberano que dirige su mirada hacia la derecha aparece divinizado con la corona del dios Helios, que desprende puntiagudos rayos de sol. Sobre su hombro izquierdo porta un tridente cuyo diente central se remata con una pequeña flor de loto. Bajo el cuello, la porción de torso que observamos se muestra profusamente engalanada.

     La parte central del reverso aparece ocupada por el cuerno de la abundancia (cornucopia), que nos recuerda por su forma el de una cabra, culminado por una diadema real. A ambos lados aparece una inscripción en letras griegas que leemos: BASILEOS que significa rey a la derecha; y su nombre PTOLOMEO a la izquierda.

      R.R.C.

NOTA: Imagen bajada de Internet.

martes, 20 de octubre de 2020

SESTERCIOS ROMANOS

                                              SESTERCIO DE ADRIANO

     Una moneda de bronce que se quedó próxima a los dos millones de dólares en una subasta celebrada hace más de una década. Acuñada hacia el año 135 de nuestra era, tres años antes de la muerte de Adriano, pulverizó el récor alcanzado muy poco antes por un áureo del emperador Alejandro Severo. Desde luego que es una pieza magnífica; una auténtica obra de arte; mostrando una calidad en la efigie del personaje insuperable.

     De rostro sereno y amable, con barba y mechones perfectamente definidos, vemos al emperador en una joven madurez y en plenas facultades, como corresponde a un mandatario de su relevancia, pues transmite seguridad y confianza a sus ciudadanos. Bajo su robusto cuello todavía queda espacio para apreciar su toga, la prenda de vestir más emblemática de Roma. Le rodea la habitual leyenda que vemos en otras monedas de una persona de su posición: HADRIANUS AVG COS III PP (ADRIANO AUGUSTO CÓNSUL III PADRE DE LA PATRIA).

     En el reveso, la leyenda nos informa que vemos a la diosa de la PAX (Paz) romana de pie y con una rama de olivo en su mano derecha, mientras sostiene el cuerno de la abundancia con la mano izquierda. Elegantemente vestida y en una posición de contrapposto que le da un cierto movimiento, además de romper con la simetría y frontalidad de la figura, lo cual hace que gane en realismo y naturalidad. En el resto del campo* aparecen las siglas latinas AVG (AUGUSTO), y a ambos lados de la diosa las conocidas S C (SENATUS CONSULTUM). Lo que nos indica que la moneda se ha imprimido con la autorización del Senado romano.

*Espacio libre que queda en ambas caras de la moneda.

      R.R.C.

MONEDA AÑADIDA EL 9-2-2021

                                            SESTERCIO DE VESPASIANO

     Esta bonita moneda romana de casi 20 g de peso es un sestercio del emperador Vespasiano del siglo I de nuestra era. El relativo gran tamaño de estas piezas de bronce permitían al diseñador ser más detallistas y precisos en las escenas que representaban, a veces, auténticas obras de arte.

     Podemos ver en el anverso la imponente efigie del primer emperador de la dinastía Flavia en una edad madura, pero sin que ello reste un ápice su fortaleza y determinación. Muestra cabeza laureada y su mirada la dirige hacia la derecha. Aparece rodeado por una leyenda en latín que abarca todo el borde de la moneda: IMP(ERATOR) CAES(AR) VESPASIAN(US) AVG(USTUS) P(ONTIFEX) M(AXIMUS) TR(IBUNICIA) P(OTESTAS) P(ATER) P(ATRIAE) CO(N)S(UL) III*. Traducido al español queda como sigue: EMPERADOR CÉSAR VESPASIANO AUGUSTO PONTÍFICE MÁXIMO POTESTAD TRIBUNICIA PADRE DE LA PATRIA TERCER CONSULADO. Tan solo recordar, que este emperador fue cónsul en nueve ocasiones y fue en el 71 d. C., fecha de edición de la moneda, cuando ocupó este cargo por tercera vez.

     En la otra cara, en el reverso, observamos a Vespasiano de pie vestido con uniforme militar, sosteniendo una lanza en posición vertical con su mano derecha, mientras sostiene una espada corta y ancha con la izquierda, típica de los altos oficiales romanos, que lucían más como una insignia de distinción que como una verdadera arma; además, un casco de guerra sirve de apoyo a su pierna izquierda. Una palmera datilera alegoría de la tierra de Judea reconquistada, tras la primera gran revuelta de los judíos contra los romanos iniciada en el año 67 de nuestra era. No obstante, no se considera finalizada esta guerra hasta la caída de Masada en el año 73. Una mujer judía sentada sobre una coraza muestra su pena y abatimiento por el drama que está sufriendo su pueblo, como consecuencia de una contienda implacable. En el borde leemos: IVDAEA CAPTA, es decir, Judea tomada. Por último, bajo la línea de exergo vemos las iniciales: S(ENATUS) C(ONSULTUM), o sea, que la moneda está hecha con la autorización del Senado romano.

*Los paréntesis recogen lo que falta en la inscripción.

      R.R.C.

 MONEDA AÑADIDA EL 24-5-2021

                                           SESTERCIO DE AGRIPINA


     Cayo Julio César Augusto Germánico, más conocido por Calígula (apodo que significa sandalia, llamado así por los legionarios de forma afable) tuvo un corto reinado (menos mal) en el siglo I de nuestra era. Desde el punto de vista numismático se acuñaron hermosas monedas, entre las que yo destacaría la que dedicó a su madre Agripina la mayor: un sestercio, lógicamente de bronce, de más de 3.5 cm de diámetro imprimido en los años 37-38 d. C. Es una auténtica obra de arte además de un pedacito de historia, como ahora veremos.

     En el anverso observamos la efigie de Agripina grabada con meticulosidad y elegancia, con un bello rostro que mira hacia la derecha, un cuidado peinado, así como los ricos pliegues de su vestimenta. Al dejar libre gran parte del campo de esta faz, salvo la parte más externa que se reserva para la leyenda, hace que destaque aún más la imagen de perfil de la representada. En la leyenda limitada por una fina grafila de puntitos leemos: AGRIPPINA M(arco) F(ilia) MAT(ter) C(aius) CAESARIS AVGVSTI, la cual puedo traducir: “Agripina hija de Marco (Agripa); madre de Cayo César Augusto”. Como se ve, la inscripción hace hincapié en que la protagonista de la pieza es la madre del emperador reinante.

     En el reverso comprobamos la presencia de un carpentum, o sea, un carro cubierto tirado por dos mulas, muy utilizado por mujeres de la alta sociedad en la antigua Roma, aunque en este caso adornado por estatuas y un pequeño altar. El carro trasladaba a la capital del Imperio los restos de Agripina, que había muerto unos años antes de inanición en la isla de Pandateria, desterrada por su tío el emperador Tiberio por la sospecha, no demostrada, de querer deponerlo. En la parte superior vemos la famosa inscripción romana: S.P.Q.R. (SENATUS POPULUSQUE ROMANUS) con la leyenda: MEMORIAE AGRIPPINAE, que traduzco: “El Senado y el Pueblo Romano / en memoria de Agripina”. Al igual que en la otra cara, una fina grafila cierra el campo de la moneda dejando libre el exergo (la parte inferior). En fin, una excelente pieza con un marcado carácter funerario.

          R.R.C.

MONEDA AÑADIDA EL 6-11-2021

                                     MONEDA VENI VIDI VICI


      Giovanni da Cavino nació en la ciudad italiana de Padua en el 1500 y falleció 70 años después en la misma localidad. Acuñó extraordinarias monedas y medallas que podríamos considerar como auténticas obras de arte. El propio Vasari, historiador del arte y contemporáneo de Giovanni, se refiere a él como una celebridad de Padua. Podríamos clasificar las piezas que elaboró en cuatro modelos:

1º Imitaciones de monedas antiguas con un nivel de perfección que costaría distinguirlas de las originales, especialmente sestercios romanos.

2º Imitaciones de monedas antiguas en las que se tomaba ciertas libertades en su realización.

3º Monedas totalmente inventadas, aunque teniendo en cuenta los gustos y características de las piezas antiguas.

4º Medallas de personajes de su época, es decir, del Renacimiento.

     Bien, la moneda que tenemos en la imagen se corresponde con el tercer modelo, luego no es romana y menos aún mandada a acuñar por Julio César, aunque de haberla conocido estoy seguro de que le encantaría, algo que también debió de tener presente su diseñador. En definitiva, nos encontramos con un sestercio renacentista de unos 25 g de peso y unos 30 mm de diámetro. En el anverso observamos la elegante y esbelta efigie de César de perfil, con corona de laurel, un lituus* tras él, y la leyenda: C.CAESAR DICTATOR (CAYO CÉSAR DICTADOR). En el reverso, en el centro del campo y rodeada de una corona de laurel, su famosa y concisa frase: VENI VIDI VICI (VINE, VI, VENCÍ) al dirigirse al Senado romano tras derrotar a Farnaces II, rey del Ponto. Dicho sea de paso, un rey polaco del siglo XVII envió una carta al papa después de una batalla que decía: “Veni, vidi, Deus vicit” (vine, vi y Dios venció), como no podía ser de otra manera.

*Es un instrumento ritual que los augures, sacerdotes de la antigua Roma, empleaban para la adivinación.

        R.R.C.

MONEDA AÑADIDA EL 2-4-2022

                                  SESTERCIO DE CLAUDIO


TIBERIO CLAUDIO CAESAR AUGUSTO PONTIFEX MAXIMUS TRIBUNICIA POTESTATE PATER PATRIAE IMPERAROR (TIBERIO CLAUDIO CÉSAR AUGUSTO PONTÍFICE MÁXIMO POTESTAD TRIBUNICIA PADRE DE LA PATRIA EMPERADOR). Una vez desarrollada la leyenda TI CLAVDIVS CAESAR AVG P M TR P P P IMP que aparece en el anverso de este sestercio acuñado entre el año 50 y 54 d. C y que supera los 30 g. El busto laureado de Claudio que mira hacia la derecha debe de ser uno de los más bellos, elegantes y delicados que nos han llegado a través de la numismática, a lo cual contribuye el excelente estado de conservación que presenta la pieza.

EX SENATUS CONSULTUM PATER PATRIAE OB CIVES SERVATOS (CON PERMISO DEL SENADO PADRE DE LA PATRIA EL SALVADOR DE LOS CIUDADANOS). Esta es la inscripción que nos presenta el reverso una vez desarrollada: EX • S • C •  P • P  OB • CIVES SERVATOS. Rodea esta cara la conocida “corona civil”, una antigua condecoración militar que se remonta a la época republicana, para aquellos soldados que hubieran salvado la vida de un compañero en el campo de batalla. La corona consistía en un aro elaborado con ramas de encina con sus hojas y bellotas incluidas. Por último, recordar que varios emperadores romanos están representados con la mencionada corona no solo en monedas.

      R.R.C.

MONEDA AÑADIDA EL10-4-2022

                    MONEDA DEL EMPERADOR CLAUDIO


     Realizada en bronce este sestercio de Claudio circa año 48 d. C. podría sobrepasar los 30 mm de diámetro y los 30 g de peso. En un estado excelente nos revela una esfinge de perfil de este gobernante, bastante realista en su faz y rodeado de la habitual leyenda que solían llevar estas piezas en época del Imperio romano. En la otra cara aparece la diosa Esperanza (Spes) personificada con su imagen habitual, es decir, con una flor en su mano y recogiéndose su vestimenta. En latín se ha especificado con la frase: Spes Ultima Dea (la esperanza es lo último que muere) o como decimos actualmente: “La esperanza es lo último que se pierde”.

     En la leyenda del anverso, una vez desarrollada y traducida al español leemos: TIBERIO CLAUDIO CÉSAR AUGUSTO PONTÍFICE MÁXIMO TRIBUNICIA POTESTAD EMPERADOR. Aunque la parte final de la inscripción no es visible por el exceso de luz, me he visto obligado a visualizar otras monedas semejantes para poder conjeturar con el máximo rigor. Igualmente, en la parte izquierda del reverso he supuesto la palabra esperanza (SPES, en latín); mientras en la parte derecha vemos claramente AUGUSTA; y bajo la imagen las iniciales S C (SENATUS CONSULTUM). Todo lo cual lo podemos interpretar como esperanza augusta o imperial, para celebrar el nacimiento de    Británico, hijo de Claudio. Y, por último, que la moneda se acuñó con la autorización del Senado romano.

       R.R.C.

NOTA: Imágenes bajadas de Internet

TETRADRACMA DE AGRIGENTO

 

     Esta bella moneda de plata fue acuñada hace más de 2400 años en la ciudad siciliana de Agrigento, la antigua polis griega de Akragas (Ἀκράγας), una de las más destacadas de lo que se conoce como Magna Grecia. Se trata de un tetradracma con un peso aproximado de 17 g estupendamente conservado. La leyenda que podemos observar en el anverso hace referencia a la ciudad emisora de la moneda, en donde también vemos una elegante águila con las alas plegadas y minuciosamente grabada con un gran realismo. Mientras, en el reverso comprobamos la presencia de un enorme cangrejo de agua dulce que parece estar vivo, incluso moverse, como si se encontrara atrapado en la propia moneda, impreso de manera tan detallista, que sus potentes pinzas presentan minúsculos dientes.

     ¿Por qué estos animales son los protagonistas de la pieza?, nos podríamos preguntar. Empezando por el águila, debemos considerar que era el ave preferida de Zeus, dios protector de la ciudad y al que se le honró con un magnífico templo. Y respecto al cangrejo debía de ser un digno representante de la especie que habitaba por las aguas de alrededor de la polis. En fin, una obra del arte numismático por la exposición, calidad y belleza de sus grabados.

       R.R.C.

NOTA: Imagen bajada de Internet.


sábado, 17 de octubre de 2020

SESTERCIO ROMANO DE TITO

 

     A pesar de lo emblemático que resulta el Coliseo en la civilización romana, ha tenido poca repercusión en el ámbito de la numismática, pues han sido poquísimos los emperadores bajo los cuales se recurrió a esta construcción para representarlo en las monedas; lo que las hace mucho más demandadas y valiosas, alcanzando los cuatrocientos mil euros algunas de ellas en buen estado, como el ejemplar que aparece en la imagen. Lo  podemos fechar con bastante exactitud, al indicarnos que pertenece al 8º año de consulado de Tito, es decir, año 80 de nuestra era.    

     El anverso aparece ocupado casi en su totalidad por el Antiteatro Flavio, en una perspectiva forzada que nos permite ver el edificio tanto por dentro como por fuera, con gran realismo y todo lujo de detalles. En su interior, observamos claramente las escaleras que recorrían la cávea y las cabezas de los espectadores. En la parte central comprobamos un pequeño semicírculo que se debe de corresponder con el parco, desde donde los emperadores seguían los espectáculos. En el exterior comprobamos las arcadas de los tres pisos inferiores, con representaciones en su luz (anchura del arco); y el último piso realizado con círculos y rectángulos. Una esbelta arquitectura a la derecha del edificio principal, y una fuente próxima al Coliseo a su izquierda llamada Meta Sudans construida por Domiciano, ya desaparecida (solo los cimientos se conservan de ella), completan la faz.

     En el reverso, la leyenda que bordea la forma circular de la moneda que vemos en la imagen, encontramos las abreviaturas latinas: IMP T CAES VESP AVG PM TR PPP COS VIII, que podríamos traducir al español como EMPERADOR TITO CÉSAR VESPASIANO AUGUSTO PONTÍFECE MÁXIMO TRIBUNICIA POTESTAD* PADRE DE LA PATRIA OCTAVO AÑO DE CONSULADO. En el centro de la misma aparece el propio emperador con cabeza de perfil y cuerpo a tres cuartos, sentado en una silla curul utilizada habitualmente por magistrados. Los demás elementos que le acompañan tienen un carácter militar. Me llama la atención como la tela que cubre sus piernas, al pegarse a ellas, las podemos captar. Por último, las letras S C (Senatus Consultum) que aparecen delante y detrás de él, nos indican que la moneda se hizo por decreto o con la autorización del Senado. Solo aparecen en las piezas de bronce de época Imperial, ya que las de oro y plata fueron potestad de los emperadores.

*Cargo que venían asumiendo los emperadores romanos desde Augusto y que tenían que renovar anualmente, con el objetivo de concentrar el mayor poder posible, al no poder ostentar la magistratura de tribunos de la plebe (tribunus plebis) reservada para los plebeyos.

     R.R.C.

viernes, 16 de octubre de 2020

MONEDA DE ORO ROMANA DE AUGUSTO (CUATERNIÓN)

 

     Impresionante moneda de oro del primer emperador romano Octaviano César Augusto, sobrino nieto de Julio César* al que el Senado romano divinizó (Divus Iulius) en el mes de enero del año 42 a. C. Nos encontramos ante una pieza única denominada cuaternión, de un tamaño muy superior al habitual áureo, conservada en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid (MAN). Su peso es de 32 g y cuenta con un diámetro de 3 cm Se cree que se acuñó en Asia Menor, posiblemente, en la ceca de Pérgamo. Aunque existen otras dos piezas similares son posteriores a esta y presentan tipologías diferentes. No tenían un uso corriente, pues se utilizaban para obsequiar a personajes relevantes, lo que explicaría, al menos en parte, el buen estado de conservación en el que se encuentra.

     En el anverso observamos la efigie del emperador Augusto, un tanto idealizado y en plena juventud (contaba 36 años), con abundante cabellera y sin ningún tipo de complemento que nos indique su alcurnia o elevada posición. Bajo él y en pequeño tamaño vemos un capricornio, su signo zodiacal, lo que nos advierte la fe que tenía el dignatario en su hado (una fuerza misteriosa que rige la vida de las personas). En la leyenda que bordea la moneda advertimos la siguiente inscripción abreviada: AVGVST • COS • VII - IMP • CAESAR • DIVI • F. Que una vez desarrollada  y traducida leemos: AUGUSTO- SÉPTIMO AÑO DE CONSULADO- EMPERADOR- CÉSAR- DIVINO- HIJO-. Las tres últimas palabras de la inscripción latina, es decir, Caesar divi filius (hijo del divino César) es un nuevo título que incorpora para señalar que es el hijo adoptivo y legítimo sucesor de Julio César, al que tanto admiraba. Para concluir esta cara, apuntar que su séptimo año de consulado lo compartió con su íntimo colaborador Marco Agripa, y eso nos lleva al 27 a. C. año en el que se acuñó la pieza, y el Senado lo nombra Emperador César Augusto.

     El reverso  de la moneda está ampliamente ocupado por un enorme y hermoso hipopótamo, típicos del río Nilo y, por ende, un magnífico símbolo del Antiguo Egipto, con la inscripción, esta vez completa: AEGYPTO / CAPTA, o sea, EGIPTO CAPTURADO. Lo cual nos retrotrae a la victoria que obtuvo Augusto sobre Marco Antonio y Cleopatra pocos años antes. Egipto se convierte en provincia romana en el año 30 a. C.

*Recordar que fue asesinado el 15 de marzo del año 44 a. C.

        R.R.C.

domingo, 4 de octubre de 2020

TETRADRACMA DE ÉFESO


     Éfeso, la ciudad en donde predicó el apóstol Pablo; la polis que cuenta con el teatro romano más grande del Imperio; localidad donde todavía podemos presenciar la imponente fachada de su antigua biblioteca; una urbe que llegó a contar con 250 000 habitantes en la costa de la actual Turquía… Pero su notoriedad desde siglos antes de nuestra era le venía dada por el templo de Artemisa, que llegó a ser considerado una de las siete maravillas del mundo antiguo, y del cual solo quedan escasos restos. Precisamente, a esta diosa hace referencia la moneda que vemos en la imagen, una de las más bellas y conocidas de su época. Hablamos de un tetradracma de plata, de unos 17 g de peso y un diámetro aproximado de unos 2.5 cm acuñado en la primera mitad del siglo IV a. C. No cabe duda de que es una pieza de gran belleza y calidad, con un estudio anatómico muy riguroso en los relieves que muestra.    

     En el anverso, comprobamos una enorme abeja muy realista, y el apócope de la ciudad, es decir, las letras griegas épsilon (E) a la izquierda de la misma; y fi (F) a la derecha, que juntas obtenemos las dos primeras letras de la polis. Si ahora tomamos en consideración que a las sacerdotisas de Artemisa de este templo se las llegó a conocer como “las abejas de la miel”, queda todo aclarado.

     La parte central del reverso se destina a grabar la porción delantera de un gran ciervo representado también con gran meticulosidad. A su izquierda observamos una hermosa palmera con tronco, hojas y fruto. Si tenemos presente que Artemisa era la diosa de la caza y el ciervo era uno de sus animales de compañía, como advertimos en las imágenes que tenemos de ella; y en segundo lugar, que la propia diosa, según nos dice la mitología, nació bajo una palmera en la isla de Delos, asunto resuelto. Por último, la leyenda griega de la derecha debía ser el nombre del “funcionario” encargado de la acuñación: ΔΗΜΑΓΟΡΗΣ (Demagores).      

       R.R.C.

NOTA: imagen descargada de Internet

viernes, 18 de septiembre de 2020

ÁUREOS ROMANOS

                                       ÁUREO DE ALEJANDRO SEVERO

     Hace más de 10 años se pagó casi 1 millón de dólares por esta preciosa moneda de oro, un áureo del emperador Alejandro Severo (último de su dinastía), lo que la convirtió en la pieza romana más cara de todas hasta ese momento. Son varios los motivos que explicarían esta desorbitada cantidad, pero por referirme singularmente a tres de ellos: en primer lugar, habría que tener en cuenta que es una moneda muy rara (creo que solo hay dos); se encuentra en un estado excepcional (salta a la vista); y en tercer lugar, las subastas se sabe cómo empiezan pero nunca cómo acaban.

     Para situar la moneda en cuestión y aclarar la aparición en la misma del famoso Anfiteatro Flavio, no es la primera vez que aparece en la numismática romana, pues lo muestra, por ejemplo, un sextercio de la época del emperador Tito para celebrar su estreno. Por otra parte, el historiador romano Dión Casio nos reporta que este edificio sufrió un gran incendio en el año 217 que lo dejó bastante deteriorado. No obstante, pese a que no estaba reparado del todo, en tiempos de Alejandro Severo (cuando se emitió esta moneda en el año 223) ya se consiguió darle uso, lo que podríamos considerar una nueva inauguración, de lo cual hace alarde la pieza.    

     En el anverso, vemos contundentemente acuñada la efigie de perfil del emperador con su habitual corona de laurel, rodeado por una inscripción imprimida en abreviatura, que completada nos dice: IMPERATOR CAESAR MARCUS AURELIS SEVERUS ALEXANDER AUGUSTUS. (No necesita aclaración, se entiende perfectamente el latín).

     En el reverso, comprobamos la parte más atractiva de la pieza (en mi opinión). Una representación del Coliseo bastante precisa desde la base hasta la parte superior, cubierta con toldos desplegables sobre la cávea, con el fin aminorar las calurosas tardes de sol en Roma durante el período estival. Los tres pisos de arcadas con estatuas entre ellas incluidas son perfectamente visibles. Una señal vertical colocada a la derecha parece indicar la altura de una planta. Mientras que un altar aparece a la izquierda. La leyenda del reverso, también en abreviaturas, nos informa que acumulaba los cargos habituales de otros emperadores: Pontífice Máximo, potestad tribunicia* (2º año) que le permitía vetar las decisiones del Senado, Cónsul y Padre de la Patria. En fin, una monada de moneda, capaz de representar de una manera tan majestuosa y en un espacio tan reducido, la construcción más imponente de toda la historia de Roma.

*Locución latina que hace referencia a la autoridad y prerrogativas que tenían los tribunos de la plebe en la época republicana, pero como los emperadores no podían ocupar este cargo eran investidos con esta facultad, que tenían que renovar todos los años. Por lo tanto, nos es bastante útil como marcador cronológico fiable.

        R.R.C.

APÉNDICE: Añadido el 2 de febrero de 2021

                                               ÁUREO DE AUGUSTO

     Fue acuñado en la ceca de Córdoba en el año 19 a. C. en oro puro y con un peso de 7.85 g. No se conocen más de una decena de este áureo del primer emperador Octavio Augusto, y esta es, posiblemente, la mejor conservada de todas. Fue adquirida por el Ministerio de Cultura por unos 50 000 euros a un particular, y será expuesta en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid una vez superada la pandemia.

     En el anverso, contemplamos la efigie de perfil y mirando a la derecha de este emperador, un tanto idealizado como era habitual, con cabeza laureada, abundante cabellera y cintas decorativas que caen por la parte trasera. Su nombre latino CAESAR AUGUSTO aparece  grabado en esta faz, delimitada por una grafila perlada que integra el campo de la moneda.

     En el reverso, contemplamos un pequeño templo circular con cúpula elevado sobre un pequeño pódium de tres escalones, rodeado de columnas (períptero) y que deja ver entre ellas: insignias y estandartes militares de las legiones, e incluso la típica águila romana. Según vemos en la leyenda “MAR – VLT” (desarrollada: Mars Ultor), hace referencia al templo de Marte Vengador. Un listel (el reborde circular) delimita el campo de esta cara.

     Por último, hacer hincapié de que nos encontramos con una moneda escasa, en muy buen estado y con una antigüedad de más de 2000 años, y al igual que otras similares, se acuñaban para conseguir un  evidente efecto propagandístico del representado.

NOTA: El templo de Marte Vengador es completamente diferente al que observamos en la moneda. Fue inaugurado en el año 2 a. C. por el propio Augusto. Para hacernos una idea de cuando estaba nuevo se podría comparar con la Maison Carrée de Nimes. Era un templo ubicado en el foro de Augusto, de orden corintio, octástilo y se empleó mármol de Carrara en su construcción.

     R.R.C.

APÉNDICE II: Añadido el 5 de febrero de 2021

                                              ÁUREO DE VESPASIANO

     Este áureo fue adquirido en el 2020 por el Ministerio de Cultura español junto con otro del emperador Augusto (ya comentado más arriba), para formar parte de la colección numismática del Museo Arqueológico Nacional. Presenta un estado de conservación excelente y fue acuñado en la ceca de Tarragona entre el 69 y 70 d. C. La cantidad de ejemplares de monedas de oro romanas producidas fuera de la capital del Imperio era muy escasa, lo cual hace que aumente su valor.

     En el anverso de la moneda vemos la efigie del primer emperador de la dinastía Flavia mirando hacia la derecha, con una corona de laurel de la que penden dos cintas sobre la parte posterior del cuello. Observamos un rostro con frente amplia; mirada incisiva; y nariz, labios y mentón prominentes. La leyenda que circunda la imagen: VESPASIANUS-IMP-CAESAR-AUG (VESPASIANO EMPERADOR CÉSAR AUGUSTO) puede leerse con toda claridad. Rodeando la pieza una grafila (los puntitos que rodean la moneda y que forman parte de su diseño). Por último, el listel, el reborde que podemos percibir por ambas caras y que sirve para proteger el áureo, ya que si lo situamos sobre una superficie plana, lo impreso no hará contacto, por ejemplo…

     El reverso nos muestra una mujer guerrera armada y vestida con atuendo militar, a modo de representación de HISPANIA, tal y como nos indica la leyenda que encontramos sobre ella. Quiero recordar que en estos momentos se mantenía la división de Hispania de Octavio Augusto en tres provincias: Baetica, Lusitania y Tarraconensis. Sin embargo, la moneda solo menciona a Hispania en su conjunto.

         R.R.C. 

APÉNDICE IIIAñadido el 19 de septiembre de 2021

                                                  ÁUREO DE TRAJANO

     Adoptado por Nerva el emperador Trajano procedente de Hispania (Itálica) gobernó desde el año 98 hasta su muerte en el 117 d. C. La moneda de oro que vemos se refiere a su VI consulado, lo que equivaldría al año 112 de nuestra era. El áureo se conserva en el Museo Arqueológico Nacional en Madrid, en un buen estado de conservación que nos permite ver con claridad tanto las efigies como la leyenda de ambas caras.

     En el anverso aparece el busto del emperador de perfil y mirando hacia la derecha, con corona de laurel y cintas decorativas en la parte posterior, coraza y manto. La leyenda abreviada rodea casi toda la faz: IMP CAES NER TRAIAN OPTIM AVG GERM DAC. Una vez desarrollada quedaría como sigue: IMPERATOR CAESAR NERVA TRAIANUS OPTIMO AUGUSTUS GERMANICUS DACICUS (EMPERADOR CÉSAR NERVA TRAJANO ÓPTIMO AUGUSTO GERMÁNICO DÁCICO -Conquistador de la Dacia-). Comprobamos por ambas caras la presencia de unos puntos (grafila) y un reborde rodeando la moneda llamado listel, para proteger el grabado de ralladuras o de un desgaste precoz.

     En el reverso vemos un busto del dios Sol con corona de rayos y manto; y en la parte externa del campo de esta cara la leyenda abreviada: PARTHICO P M TR P COS VI P P S P Q R. Que completamos: PARTHICUS PONTIFEX MAXIMO TRIBUNICIA  POTESTATE CONSUL VI PATER PATRIAE SENATUS POPULUSQUE ROMANUS (CONQUISTADOR DE PARTIA- MÁXIMO PONTÍFICE- POTESTAD TRIBUNICIA- VI AÑO DE CONSULADO- PADRE DE LA PATRIA- EL SENADO Y EL PUEBLO ROMANO.)

     Las monedas de Trajano nos informan de sus éxitos militares, trofeos, construcciones… Las utilizaba para engrandecer aún más sus actuaciones como emperador. En fin, nada nuevo bajo el sol (de Roma).

        R.R.C. 

 APÉNDICE IVAñadido el 13 de octubre de 2021 

                                                     ÁUREO DE NERÓN

“De la unión de Agripina y yo solo puede salir un monstruo”. La frase con la que se inicia este post es del primer marido de Agripina la Menor, Cneo Domicio, padre ¿biológico? del emperador Nerón, que llegó al cargo con tan solo 16 años en el 54 d. de C., fecha de acuñación de la moneda de oro que vemos en la imagen: un áureo de casi 20 mm de diámetro y cerca de 8 g de peso, conservado en el Museo Británico de Londres.

     En el anverso constatamos las efigies de perfil frente a frente y al mismo nivel, como si fueran cogobernantes, al joven emperador y a su madre Agripina en alto relieve. La leyenda que rodea completamente la faz nos indica: AGRIPP AVG DIVI CLAVD NERONIS CAES MATER (Agripina Augusta, (esposa) del divino Claudio, madre de Nerón César). Agripina se casó con su tío el emperador Claudio (era su tercer matrimonio) y consiguió que este adoptase como hijo y sucesor a Nerón, en lugar de Británico que en teoría era su hijo biológico que había tenido con Mesalina. En Roma, lo importante era la adopción legal y no quién había puesto el espermatozoide. De hecho, una expresión latina decía: Mater semper certa est (la madre es siempre conocida), que podríamos complementar: Pater semper incertus est (el padre es siempre desconocido). En fin… una grafila limita el campo de la moneda por ambas caras.

     En el reverso nos encontramos una corona vegetal, en cuyo interior leemos: EX SC que podríamos traducir: con la autorización del Senado. La inscripción abreviada que circunda esta cara manifiesta: NERONI CLAVD DIVI F CAES AVG GERM IMP TR P (Nerón, hijo del divino Claudio, César Augusto Germánico, emperador con potestad tribunicia).

       R.R.C.

 APÉNDICE VAñadido el 28 de marzo de 2022

                                ÁUREO DEL EMPERADOR AUGUSTO

      Preciosa moneda de Augusto acuñada en la ceca de Colonia Patricia (Córdoba), que durante un breve período de tiempo estuvo autorizada a imprimir monedas de oro, lo cual hace la pieza más exclusiva. Anepígrafa en el anverso, ya que en Numismática este término hace referencia a que una moneda no presenta inscripción alguna, o bien en una de sus caras. El joven rostro del emperador mira hacia la derecha. En su cabeza observamos destacados mechones de cabello engalanados y caen cintas de adorno en dirección a su espalda. Con un peso de 7.73 g fue acuñada hacia el 25- 22 a.C. con un diámetro próximo a los 2 cm. Todavía podemos ver rodeando la efigie del emperador parte de la grafila perlada, y del listel por ambas caras. En cuanto al reverso, observamos el nombre de CAESAR AUGUSTUS (César Augusto) de una manera destacada, mientras en el centro comprobamos la presencia de un escudo que no se usaba en combate con las siglas CL.V (Clypeus Votivus- Escudo Votivo) en su interior, que se solía ofrecer en los templos paganos para conmemorar una victoria militar. Las conocidas letras S.P.Q.R. (SENATUS POPULUSQUE ROMANUS-El Senado y el Pueblo Romano) aparecen rodeando el escudo. El resto del campo lo ocupan dos destacadas plantas que no me atrevo a precisar debido a mis carencias en botánica. Por último, indicar que se conserva en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid.

APÉNDICE VIAñadido el 15 de abril de 2022

                   ÁUREO DEL EMPERADOR VESPASIANO

     En la imagen visualizamos un bonito áureo de Vespasiano, primer emperador de la dinastía Flavia, que alcanzó el poder en la segunda mitad del siglo I d.C. Acuñado probablemente en la actual localidad francesa de Lyon. La calidad de la pieza es muy buena y debe de pesar entre 7.5-8 g y medir unos 18 mm de diámetro.

     En el anverso vemos una efigie robusta del emperador que ocupa gran parte del campo de la moneda, la cual mira hacia la derecha con rostro duro, grueso cuello y cabeza laureada. Aparece rodeada por la leyenda: IMP CAESAR VESPASIANUS AUG TRP (IMPERATOR CAESAR VESPASIANUS AUGUSTUS TRIBUNICIA POTESTAS), que traducimos como “EMPERADOR CÉSAR VESPASIANO AUGUSTO CON POTESTAD TRIBUNICIA”. Una grafila perlada delimita la faz, al igual que la otra cara.

     En el reverso contemplamos una bella imagen femenina en el centro de la moneda, con una balanza y un cetro: Aequitas, que encarna el concepto de equidad entre los ciudadanos en la Antigua Roma. La podemos interpretar como un acto propagandístico de tipo religioso por parte del emperador. La inscripción: COS ITER TRPOT (CONSUL ITERUM TRIBUNICIA POTESTAS), que podríamos traducir al español: “CÓNSUL CONFIRMADO EN EL CARGO POR SEGUNDA VEZ CON POTESTAD TRIBUNICIA”.

       R.R.C.

domingo, 13 de septiembre de 2020

MONEDA ANTIGUA DE NECTÁNEBO II Y MONEDA MODERNA EGIPCIA

 


     Estamos viendo el reverso de la moneda del que fue el último faraón egipcio Nectánebo II, que reinó hacia la mitad del siglo IV a. C. El Antiguo Egipto no parece haber sido un país en donde las monedas fueran de uso corriente; ni el Estado estuviera muy interesado en emitirlas. Fue el faraón mencionado el que mandó realizar una serie de piezas como la expuesta. Su peso es de unos 8.5 gramos y el metal empleado es el oro. En la parte que no vemos (el anverso) se limita, simplemente, a la imagen de un caballo en movimiento representado de una manera bastante realista y no presenta leyenda alguna.

     Pero lo más significativo de esta peculiar moneda es, que por primera vez se representa un jeroglífico típicamente egipcio y que, además, hace referencia al metal del que estás hecha la propia pieza. Se emplean dos signos entrelazados: uno con apariencia horizontal y otro con traza vertical. El primero de ellos representa un gran collar del que penden seis cuentas, que simboliza el oro en esta escritura y se transcribe nub. Mientras el segundo signo se compone de una tráquea con corazón, que es un ideograma de: bello, perfecto, bueno…, pero en este caso podríamos traducir ambos jeroglíficos unidos por “oro fino” o “buen oro”. Por último, son muy pocos los ejemplares que se han encontrado, lo cual hace que aumente su valor.

      R.R.C.

P. D. (Añadida el 17-4-2021)                                     

                                     MONEDA DE LIBRA EGIPCIA ACTUAL


     Con un tamaño intermedio entre la moneda de 1 euro y 2 euros, la libra egipcia que comenzó a circular desde el 2007, presenta un diámetro de 25 mm con un borde estriado. Es bimetálica, cuyo centro es de latón (una aleación de cobre y zinc) y su anillo exterior es de cuproníquel  (una aleación de cobre y níquel principalmente).

     El anverso nos muestra la máscara funeraria de Tutankamón, el faraón más famoso y mediático del Antiguo Egipto, rodeada de una orla de flores de loto muy apreciadas en aquella época. Al ser una representación monocroma (dorada) no conlleva el impacto cromático de la obra original. No obstante, el resultado es magnífico.

     El reverso exhibe un grueso y vertical trazo central que es 1 en árabe. Bajo el signo nos encontramos con la palabra libra en el mismo idioma. También aparece “una libra” en inglés en el anillo externo.  El resto de la inscripción arábiga indica el país: República Árabe de Egipto y la fecha de emisión de la moneda en dos calendarios distintos: el musulmán y el cristiano. En consecuencia, la pieza mostraría dos años diferentes, por ejemplo: el 2008 del calendario cristiano y el 1429 del musulmán.

       R.R.C.

sábado, 12 de septiembre de 2020

LOS SICLOS DE TIRO (LA MONEDA DE JUDAS)

 

     Todo el mundo conoce que Judas Iscariote, el discípulo que traicionó a Jesús, lo delató a sus enemigos por treinta monedas de plata. Ese fue el precio que pagaron las autoridades judías por facilitarle el prendimiento de su Maestro, si nos atenemos a la información que nos transmite el N.T. ¿Pero, de qué monedas se trataba? Con frecuencia se ha dicho que eran denarios romanos, pues al propio Jesús le mostraron uno cuando sentenció: “Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”, probablemente, fue la cara del emperador Tiberio la que vio grabada en el anverso de la moneda. Sin embargo, actualmente se cree poco probable que a Judas le pagaran su felonía con este dinero. Lo más lógico es que fuese con siclos de Tiro (o shékels de Tiro), semejantes al que vemos en la imagen.

     En el anverso observamos el rostro de Baal (asociado a Melkart); dios fenicio que podríamos comparar con el héroe griego Hércules. Con una rica cabellera recogida con una corona de laurel y dirigiendo su mirada a la derecha. Mientras en el reverso advertimos, que una impresionante águila posa sus garras en un sólido espolón de una nave militar; y la leyenda escrita en griego que circunvala esta cara dice: ΤΥΡΟΥ ΙΕΡΑΣ ΚΑΙ ΑΣΥΛΟΥ, traducido al español: “Tiro (ciudad) santa y (ciudad) de refugio”. Además, dos letras en esta antigua lengua nos indican el año de emisión de la moneda.

     Sabemos, que los judíos debían de pagar medio siclo de plata de una determinada pureza por persona y año. Concretamente, los acuñados en la cercana ciudad de Tiro cumplía los requisitos, o sea, un 95% de plata. Pero los romanos empezaron a utilizar otra moneda de menor pureza, que solo contenía un 80% del blanco metal, lo que la convertía en inservible para el Templo. Según Ya'akov Meshorer*, jefe de arqueología del Museo de Israel en Jerusalén y experto numismático, por este motivo solicitaron a la autoridad romana emitir ellos su propia moneda, y esta accedió con la condición de que tenía que mantenerse el mismo formato, para no dar a los judíos una competencia que no tenían. No obstante, estos tuvieron la habilidad de introducir: KP un par de letras (un acróstico), que podían transmitir el mensaje de que lo hacían por una imposición de Roma. Algo parecido a lo que hacen hoy en día los políticos independentistas, o simplemente nacionalistas, cuando acatan la Constitución española por imperativo legal (como vemos, no han inventado nada).  

     Quiero recordar, que los cuatro evangelios recogen el episodio de la expulsión del Templo por parte de Jesús de los mercaderes y cambistas, cayendo sus monedas al suelo. ¿Qué función tenían allí estos últimos? Suministrar la moneda adecuada a los que iban a pagar el tributo al Templo a cambio de una “pequeña” comisión. Para el que haya viajado en avión y comprado moneda extrajera en las casas de cambio de los aeropuertos, entenderá que lo de “pequeña” es una ironía.

     En fin, los siclos de Tiro podían estar hechos en la ceca de esta ciudad, o en Jerusalén mismo. Debían de tener un diámetro próximo a los 3 cm y pesar en torno a los 14.5 gramos. Por otra parte, que los sacerdotes judíos aceptaran guardar en el Templo el rostro de un dios pagano, no deja de ser paradójico. En resumen, lo más factible es que utilizaran el numerario guardado en el edificio para pagar a Judas sus 30 monedas de “sangre”, con un peso total superior a los 400 gramos. Ese fue el precio de la traición.

*La afirmación de este autor recogida indirectamente.

        R.R.C.

NOTA: Imagen descargada de Internet

miércoles, 9 de septiembre de 2020

EL PRIMER DÓLAR Y LA PRIMERA MONEDA (LA CRESEIDA)


     Hasta ahora solo he comentado monedas griegas o romanas (salvo la “dobla” de Pedro I de Castilla), pero con la que vemos en la imagen voy a hacer una singularidad, ya que se trata de un dólar de plata norteamericano diseñado por Robert Scott, de cuatro centímetros de diámetro emitido en 1794, y si no es el que inicia la serie es uno de los primeros. No existen dudas de que se trata de la moneda mejor conservada de todas las que se hallan actualmente: 130 de las 1758 que se acuñaron en su día. En 2013 se subastó y se pagó por ella más de 10 millones de dólares (nunca antes una moneda alcanzó semejante cifra), y el 8 de octubre de este mismo año se volverá a subastar en Las Vegas.

     En el anverso representa a una joven mujer con el cabello suelto que parece moverse por la acción del viento, con su mirada dirigida al infinito personifica la libertad. Precisamente, sobre su efigie aparece la palabra LIBERTY y bajo su cuello la fecha de emisión 1794. Entre ellas observamos quince estrellas de seis puntas que simbolizan los quince estados que en esos momentos integraban los EEUU. Tanto en esta faz como en la otra cara muestra una grafila dentada (líneas verticales que parten desde el borde elevado de la moneda en dirección a su centro).

     En el reverso vemos una soberbia y estilizada águila con sus alas desplegadas como símbolo de poderío, circundada por una corona de tipo vegetal compuesta por dos ramas que se entrelazan en su base. Esta ave ya fue empleada por otras culturas anteriores como el Imperio romano, por ejemplo. El nombre del país que realizó la pieza UNITED STATES OF AMERICA completa esta cara.

     Por último, me parece importante tener en cuenta que no se hizo para darle un uso corriente, que pasara de mano en mano, sino que se acuñó para utilizarla como recuerdo y regalarlo a personajes importantes de la época.

     Qué duda cabe de que nos encontramos ante una moneda muy bella y… ¡Cara!

       R.R.C.

P.D. Añadida el 12 de octubre de 2022

                                                       LA CRESEIDA

     Heródoto nos transmite de pasada (ya que escribe de otras cuestiones) en el cap. 94 de su primer  libro de Historia, que los lidios fueron los primeros que acuñaron monedas de oro y plata, y los que llevaron la iniciativa del comercio al menudeo. Estas primeras monedas que podríamos denominar creseidas en honor al rey lidio Creso, que bajo su mandato se acuñaron en la ceca de Sardes (Asia Menor) a mediados del siglo VI a. C. El hecho de que para la realización de estas piezas se utilizaran los metales preciosos mencionados dio lugar al primer sistema monetario bimetálico del mundo, y que tuvieran un valor intrínseco objetivo en función de su peso, garantizado por el Estado emisor. El sistema de equivalencia monetaria que se estableció fue de una creseida de oro de 8.1 g a diez de plata de 10.7 g.

     La pieza que vemos en la imagen es una creseida de oro impresa circa 550 antes de nuestra era. Tiene un peso de poco más de 8 g y con forma oblonga. El anverso presenta de manera realista un león frente a un toro que ha dado lugar a diversas interpretaciones, como símbolos del sol y la luna, por ejemplo. El reverso lo encontramos bastante simplificado ya que se reduce a dos cuadrados incusos (hundidos) y yuxtapuestos.

     Por último, aunque ya circulaban monedas por la zona de Asia Menor desde hacía un siglo, no tenían la fiabilidad y confianza que las mismas que acuñó Creso, cuestión fundamental para su utilidad, así que, podemos considerar a este rey el primero en ofrecer al mundo una moneda fiable y, de paso, sentar las bases del patrón oro que ha durado hasta 1971.

NOTA: El padre de Creso, Aliates, ya había emitido anteriormente monedas hechas de una aleación de oro y plata a comienzos del siglo VI a. C. en esta misma zona, pero no estaban estandarizadas, lo cual dificultó su uso. No obstante, empleó un sello real como garantía por parte del Estado ya que el valor de la aleación no estaba claro.

     R.R.C. 

NOTA II: Imágenes descargadas de Internet.

lunes, 31 de agosto de 2020

DENARIO ROMANO DE AUGUSTO

 

     Del latín denarius es una antigua moneda de plata romana equivalente a diez ases, por lo que su símbolo es una X. Su peso fue variando con los años desde poco más de 4.5 g hasta los 1.7 g e incluso menos. Fue una pieza base del sistema monetario romano desde el siglo III a. C. hasta el siglo III de nuestra era.

     La moneda que aparece en la imagen fue emitida poco antes de la proclamación de Octaviano como primer Emperador en el año 27 a. C. El cual compartió consulado con su íntimo colaborador y futuro yerno, Agripa. En el anverso de la misma vemos el rostro de un Augusto joven de perfil con nariz prominente, abundante cabellera y un ojo preciso y destacado. Detrás de su largo cuello aparece un símbolo religioso llamado lituus, objeto ritual muy utilizado por los augures (sacerdotes de la antigua Roma), que nos recuerda al HEQA egipcio que interpretábamos como gobernante o posteriormente, al báculo (cayado) episcopal cristiano. Tenemos que considerar que el Emperador era también una autoridad religiosa, y el empleo de este elemento en la moneda la hace menos beligerante. También aparece una inscripción en latín que pone lo siguiente: CAESAR COS. VI; que traducimos como “César, cónsul por sexta vez”.

     Mientras en el reverso aparece un gigantesco cocodrilo como símbolo del país del Nilo, en una actitud agresiva mostrándonos sus poderosas mandíbulas, con un vigoroso cuerpo cubierto de escamas y una retorcida cola siguiendo la forma circular de la moneda. La leyenda AEGVPTO CAPTA, es decir, “Egipto capturado” completa esta cara de la pieza en cuestión. Lógicamente, al igual que en otras monedas romanas el efecto propagandístico resulta evidente.

     R.R.C.

NOTA: Imagen descargada de Internet.

viernes, 21 de agosto de 2020

EL ESCARABAJO DORADO DE NEFERTITI

             

     Fueron necesarias once campañas de arqueología subacuática y una década (entre 1984 y 1994), para recuperar los tesoros de un pecio en la costa meridional de Turquía, cerca de la ciudad de Kaç, para, posteriormente ser trasladados al Museo de Arqueología Submarina de Bodrum (la antigua polis griega de Halicarnaso). El barco llamado Uluburun, de 15 metros de largo y unas 20 toneladas de carga, se encontraba hundido a unos 50 m. de profundidad, pues naufragó en este lugar hace unos 3300 años. De su valiosa mercancía solo me ocuparé de este pequeño escarabajo de oro egipcio, de cerca de un centímetro y medio de largo, por uno de ancho y casi medio de grosor.

     Como podemos ver en su base, este escarabajo perteneció la famosa reina Nefertiti, Gran Esposa Real del faraón Akenatón, y es el único escarabeo de oro que nos ha llegado del período de Amarna en el siglo XIV a. C. Es evidente el valor de esta pieza mientras la pareja real se encontraba en el poder, y solo se puede explicar que apareciese formando parte de un conjunto de objetos más amplio, una vez que los soberanos habían desaparecido, probablemente, su único interés era el material del que estaba hecho. En la actualidad esto no es así, ya que nos hallamos ante un objeto exclusivo de aquella lejana época.

     Bueno, pero ¿qué podemos leer en su base? Literalmente: nfr-nfrw-itn nfrt-iiti, pues el determinativo que nos indica que se trata de una reina y que vemos en la parte inferior derecha no se pronuncia. Una vez traducido al español queda: “Hermosas son las bellezas de Atón; La bella ha llegado”, o sea, Nefertiti. Por último, hay que recordar que durante el reinado de su marido el único dios merecedor de culto era Atón, identificado con el Sol mismo.

ACLARACIÓN: el jeroglífico no tiene equivalente al verbo ser, en consecuencia hay que atenerse al contexto para traducir.

         R.R.C.

NOTA: imagen bajada de Internet.