La moneda
que vemos en la imagen de una calidad excelente está acuñada en la ceca de
Jerusalén, una vez empezada la primera revuelta de los judíos contra la
dominación romana, más concretamente en el año 69 de nuestra era. El material
utilizado fue la plata y debe de andar en torno a los 14 g de peso y 2.5 cm de
diámetro. Esta primera guerra contra Roma comenzó en el año 66 y finalizó con
la destrucción y saqueo del templo de Jerusalén y la toma de Masada en el 73 d.
C. El emperador Vespasiano emitió
monedas que celebran las victorias obtenidas en Judea.
En su anverso vemos un típico cáliz judío
de borde perlado con la leyenda en hebreo “shekel de Israel”. Mientras que en
el reverso aparece en el mismo idioma “Jerusalén la Sagrada” y se muestran tres
granadas saliendo de un mismo tallo. La granada, como alegoría de la
fertilidad, era un símbolo de Judea, además de otros pueblos mediterráneos,
también las utilizaban los sacerdotes para decorar el Templo, según nos informa
Flavio Josefo. En ambas caras lo que vemos son símbolos bíblicos, lo cual nos
indica el peso de la religión en la sociedad judía de la época. Una grafila
bien centrada corrobora igualmente la calidad de esta pieza.
Tan solo recordar que el hecho de emitir
una moneda de plata, y más de estas dimensiones, era una declaración de guerra
a la autoridad romana, pues no estaban autorizados para ello.