jueves, 21 de septiembre de 2017

Independencia de Cataluña durante la II República Española

     Recientemente, antiguos alumnos y compañeros míos me preguntan cómo fue la reacción del gobierno de la II República Española, ante la proclamación de independencia por parte de la Generalidad de Cataluña. Aquí os dejo un documento de la época en el que destaco una parte relevante del mismo:

     El Diario Oficial del Ministerio de la Guerra (equivalente al Ministerio de Defensa actual) de La II República Española, ante la proclamación por Lluís Companys del Estat Catalá, el 6 de octubre de 1934, es decir, de la independencia de Cataluña. Esta fue la reacción del gobierno de la República presidido por Alejandro Lerroux, publicado por La Gaceta, nº 280, equivalente al BOE actual. Tan solo recordar que el nuevo Estado duró 11 horas; desde las 8 horas del día 6 de octubre hasta las 7 horas del día siguiente, en la que fue detenido Companys y todo su gobierno.

NOTA: Hacer click sobre "DIARIO OFICIAL" para una mejor lectura.
      R.R.C.

miércoles, 6 de septiembre de 2017

EL CARTUCHO EGIPCIO



     En jeroglífico se lee SHEN, fueron los soldados de Napoleón cuando invadieron el país del Nilo hace ya más de 200 años, los que llamaron cartuchos a estas representaciones que observaron en las paredes de las construcciones del Egipto faraónico, por el parecido que tenían con las petacas en donde guardaban la pólvora que utilizaban para sus armas de fuego. En realidad, es una cuerda ovalada que se cierra en su base con un nudo, y se empleaba para escribir en ella el nombre de los faraones, y en algunas ocasiones los de los Sumos Sacerdotes de Amón, que a veces detentaron más poder que el propio monarca. Luego, delimitaban y se adaptaban al nombre del faraón, el cual quedaba perfectamente aislado del resto del texto, en una escritura que carecía de signos ortográficos.
     Empezaron a usarse en la muy lejana segunda dinastía, pero no se hicieron habituales hasta la cuarta (estamos hablando del III milenio a. de C.). En el fondo, estos cartuchos simbolizan el cosmos que el faraón dirige, y en el que ejerce todo su poder. Una cuestión importante es poner de relieve que tuvieron un papel fundamental en el desciframiento de la lengua jeroglífica, ya que llamaron la atención de Champollion desde el principio.
     Por último, la duda que invade a los astrofísicos actuales de si el universo se expande o es finito, para los egipcios estaba claro: se expande dependiendo de la extensión del nombre del faraón.
NOTA: En el cartucho de la imagen vemos el Nombre de Nacimiento de Tutmosis III, el hijo de Ra.
       R.R.C.

martes, 5 de septiembre de 2017

EL PATO DE LOS JEROGLÍFICOS



      Para darnos una idea de lo complicada que es la escritura jeroglífica,  hubo que esperar al primer tercio del XIX, y que Dios creara a Champollion y dijera: “hágase la luz”, y hubo luz sobre estos misteriosos signos y dibujos, que  gracias a su tenacidad, esfuerzo, y sabiduría nos puso 3000 años de historia delante de nuestros incrédulos ojos.                                    
     El punto de partida para la comprensión de esta escritura lo expone Champollion en esta, podríamos decir, genial observación: “La escritura jeroglífica es un sistema complejo, una escritura que es a un tiempo figurativa, simbólica y fonética en un mismo texto, en una misma frase, casi diría en una misma palabra”. Para entender esta afirmación, lo mejor es seguir el ejemplo que pone Chistian  Jacq en su libro El enigma de la piedra. La representación de un pato en la escritura jeroglífica se podría traducir simplemente por lo que vemos, es decir, pato. En este caso la escritura es figurativa. Ahora bien, cuando el ave está acompañada por el signo del sol, en un epíteto referido al faraón, la traducción ya no es pato, sino hijo del sol. En este caso el pato significa hijo, que no tiene nada que ver con el ave y, por tanto la escritura jeroglífica es en este caso simbólica. Nuestro pato puede actuar también como un sonido: sa. Por lo que ya no se puede traducir como pato, o hijo y puede servir para escribir palabras que contengan el sonido sa, por ejemplo, masa. En este caso la escritura egipcia es fonética. 
     En consecuencia, al aparecer el pato de la imagen junto al disco solar que se identificaba con Ra, se leería: El hijo de Ra”.        
      R.R.C.