martes, 28 de agosto de 2012

LOS RÍOS ESPAÑOLES.



     Los ríos peninsulares se distribuyen en dos vertientes hidrográficas: la atlántica y la mediterránea (se pueden clasificar en tres si separamos la cantábrica de la atlántica). Existe una gran disimetría entre ambas, ya que la vertiente atlántica es muy ancha y amplia y tiene los ríos más grandes, salvo el Ebro, de España.

A)- La vertiente atlántica. Tiene una superficie y volumen de aguas mayores que la mediterránea, debido a la basculación de la Península hacia el Oeste, litología más impermeable (suelos silíceos y arcillosos) y al clima. En esta vertiente podemos distinguir:- los ríos cantábricos (algunos autores los señalan como ríos de la vertiente cantábrica), que son cortos, caudalosos, regulares y muy erosivos, debido a la disposición del relieve y al clima oceánico; los más importantes son el Bidasoa, Nervión, Nalón, Eo. – Los ríos que recorren la Meseta y la Depresión del Guadalquivir que son ríos largos ya que nacen cerca del Mediterráneo y desembocan en el Atlántico; salvo los gallegos (Tambre, Miño, Ulla...) que están en un clima oceánico y son semejantes a los cantábricos, el resto pertenecen al clima mediterráneo continentalizado, por lo que van a ser irregulares, con estiaje estival y crecidas en primavera y otoño.
En esta vertiente encontramos diferentes cuencas hidrográficas, que reflejan disimetría en cuanto a su tamaño:

-        Cuenca Norte: Aquí muchos autores engloban todos los ríos cantábricos y los gallegos, debido a sus características comunes.
-        Cuenca del Duero: La más grande de España, ya que ocupa toda la Submeseta Norte.
-        Cuenca del Tajo: Es el río de mayor longitud (1.120 Km.).
-        Cuenca del Guadiana: presenta endorreísmo que le hace desaparecer durante varios kilómetros de su cauce.
-        Cuenca del Guadalquivir: es una de las más grandes porque coincide con toda la depresión que lleva su nombre.

B)- La vertiente mediterránea. Sus ríos son cortos, irregulares  y poco caudalosos a excepción del Ebro. En general, en esta zona, aparecen ramblas (cauces secos que solo llevan agua después de las tormentas), barrancos y tienen endorreísmo por circular por terrenos kársticos. Muchos de ellos tienen bastante poder erosivo por su pendiente, torrencialidad y escasez de vegetación. Su régimen es pluvial mediterráneo y muy irregular con grandes estiajes en verano, pudiendo sufrir en los equinoccios grandes crecidas que ocasionan catastróficas riadas. La mayoría de ellos han sido regulados con embalses para garantizar el abastecimiento de agua a la población, agricultura, industria….Las reservas acuíferas de esta zona es muy escasa (mayor déficit hídrico) por lo que se hace necesario construir trasvases (Tajo- Segura) o plantas desalinizadoras.
Las cuencas hidrográficas que se incluyen en la vertiente mediterránea son:

-        Cuenca del Pirineo Oriental: se corresponde con los ríos catalanes, y agrupa ríos como el Fluviá, Ter y Llobregat.
-        Cuenca del Ebro: Es una de las más grandes de España y  el Ebro es el río más caudaloso de España, debido en gran parte por sus afluentes pirenaicos: Aragón, Gallego, Segre…
-        Cuenca del Júcar: Agrupa a ríos como Mijares, Turia y Júcar.
-        Cuenca del Segura: es la más deficitaria de agua.
-        Cuenca del Sur: recoge los aportes hídricos de todos los ríos de la Andalucía mediterránea como el Almería, Adra, Guadalhorce, Guadiaro…
     Las cuencas hidrográficas españolas se organizan administrativamente desde 1926 dentro de una confederación hidrográfica, con la finalidad de estudiar, construir y explotar las infraestructuras de interés general en el territorio de la cuenca y gestionar el dominio hidráulico público de la misma.