viernes, 13 de diciembre de 2024

Comedian: la banana más cara de la historia

 

     Obra del artista italiano Maurizio Cattelan, que consiste en una banana o un plátano (como prefieran) pegado a una pared blanca con cinta adhesiva, justo a 1.60 m de altura. La obra se presentó por primera vez en 2019 y culminó con el artista comiéndose su propia obra a modo de improvisación, ante la multitud de espectadores que lo contemplaban. Fue expuesta en Miami, subastada y comprada en noviembre de 2024 en seis millones doscientos mil dólares. Sí han leído bien y no es broma. Eso sí, el comprador se comprometía a sustituir el plátano cada semana, además, se lo comió, aunque esto lo hizo por su cuenta, y qué duda cabe que ha sido el plátano más caro de la historia. Quiero pensar que estaría sabroso. Hay que tener en cuenta que esta realización conceptual ya se vendió anteriormente por 120 000 $ en una subasta, vamos, una ganga. Por otra parte, al igual que ocurrió con el controvertido Urinario masculino que M. Duchamp envió a una exposición de artistas en Nueva York en 1917, que también resistió un asalto, Comedian fue arrancado de la pared por un artista, y se lo comió delante de los allí presentes aduciendo que tenía hambre, performance (acción)  que le dio más publicidad.

     Según Cattelan, su trabajo simboliza una crítica al mercado del arte que viene ya del siglo XX y lo absurdo que resulta. Por supuesto, hace hincapié en la idea de que el mérito radica en el concepto y no en el objeto que vemos. Así, transformamos un objeto habitual en una reflexión sobre el consumo, el arte y el capitalismo. Es evidente que Cattelan se ha hecho un sitio de honor el en mundo provocativo, conceptual y excéntrico del arte: una estupidez (no quiero emplear palabras más gruesas) para unos y una genialidad para otros. En definitiva: ¿Qué es arte y que no?

     De todas formas, este tipo de exhibiciones no es algo nuevo, viene de lejos, concretamente me estoy acordando del ya mencionado M. Duchamp, que puso de moda el ready-made, en donde el proceso creativo que precede a la obra es más importante que la obra misma, que consistía en una distribución arbitraria de objetos cotidianos que ya no servían para lo que fueron hechos, y que se convertían en obras de arte porque así lo decidía el artista. En 1913 creó el primer ready-made, que consistía en una rueda delantera de bicicleta sobre un taburete de cocina de cuatro patas, lógicamente, firmado por él. Luego es el artista el que decide si es arte o no. Llegó a anunciar que podía darle por firmar el famoso rascacielos de Nueva York: el Empire State Building, y convertirlo en una obra de arte (para mí, que tuve  oportunidad de verlo, es una grandiosa arquitectura firmada o sin firmar).

     En fin, si Comedian es una obra de arte, que baje Dios y lo vea.

          R.R.C.